
Por increíble que parezca en EEUU se plantean combatir la obesidad aumentando los impuestos a productos como las pizzas, bebidas gaseosas y comidas fast-food.
Realmente la obesidad es una de las grandes preocupaciones sociales en el primer mundo, y, sobre todo, en los Estados Unidos. Recordemos que ya hablamos en un artículo de esta plaga del siglo XXI.
En este país, cuna de la obsesidad, dos tercios de la población adulta la padece. Es un cifra que impresiona, la verdad.
Un grupo de investigadores de la Universidad de Carolina del Norte propone que, si el impuesto de estos productos causantes de la obesidad aumenta a un 18%, puede ayudar a reducir el consumo de calorías y, además, los obesos podrían adelgazar hasta dos kilos anuales.
Este grupo de investigación es consciente que con esta medida no se superará la lacra pero sí favorecer que su consumo por lo menos se rebaje.
Además consideran que se podría favorecer el descenso de otra gran lacra de nuestra sociedad occidental como es la diabetes, tal como también comentamos en otro artículo anterior.
La idea de estos investigadores parece que ya ha calado en algunos grupos políticos del país y creen que puede ser una medida importante para rebajar la obesidad.
Ahora bien, “con la Iglesia, mejor dicho, con las Multinacionales hemos topado”, que bien podría decir nuestro genial Cervantes si viviera ahora.
Tiempo al tiempo y veremos cómo acaba la idea de esta Universidad.
Fuente: innatia.com
Imagen de Yuyo Saine
Dom, Mar 14, 2010
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